viernes, mayo 26, 2006

Pequeña niña grande...

¿Cuándo deja uno de ser un niño para convertirse en un adulto?

Esta fecha no está marcada en ningún calendario, y a cada persona le llega en un momento determinado. A las mujeres siempre nos dicen que una vez te viene tu primera menstruación (un día fatídico… ya te va a acompañar durante muuuuchos meses a lo largo de tu vida!). Eso tampoco es cierto, conozco a muchas madres que tienen menos “seso” que otras chicas, cuya edad no llega a los 20.

Yo me considero adulta en muchas cosas, en otras soy todavía una chiquilla, pero… quién dice qué comportamiento es el adecuado para una edad y por qué?

Analizando se puede decir que en madurado en algunos aspectos:

- Mi forma de hablar. Antes prácticamente no hablaba, me quedaba al margen y me guardaba mis opiniones para mí. Ahora por el contrario, me gusta dialogar, debatir e incluso discutir… pero siempre dentro de un margen de educación, no me gusta ni gritar, ni chillar, ni nada de eso.

- Tener el carné de conducir y ser consciente de lo que llevas en tus manos, comportarte al volante y no hacer el cabra.

- Dialogar con mi pareja (aunque creo que él dialoga más que yo… ) y resolver todo a través de las palabras.

- Administrarme yo misma. Esto me resulta bastante complicado, pero el día que tienes deudas y han de ser solventadas, es cuando más necesitas pensar de manera adulta.

- Trabajar. Personalmente el trabajo me ha influido mucho. Todos los jefes que he tenido hasta el momento me han dejado a cargo de todo, me han demostrado que me ven como una persona responsable, activa y currante. Y yo he ido avanzando mucho.

- Sentir vergüenza ajena de la/os niña/os de hoy. Supongo que eso es síntoma también de que me estoy haciendo mayor, aunque siempre me ha pasado algo así, incluso con las de mi edad…

- Hablar de sexo sabiendo lo que es. Para mí antes era un tema “TABU”, supongo que los 13 años de antes no eran iguales a los de ahora. Nadie aireaba a los cuatro vientos con quien se acostaba, ahora, en el metro, puedes oír como chiquillas cuentas sus experiencias ante los oídos de las abuelas, haciendo que se monte un escándalo impresionante.

Por otro lado, hay muchos momentos en los que me considero todavía una niña, sobretodo:

- Cuando alguien me hace un regalo “porque sí”. Parezco una niñita de 6 años.

- Cuando intento robarle algún mechero o bolígrafo chulo a mi amigo, el chino (siempre lleva cosas super chulas!)

- Cuando me mosqueo y me altero, y lo pago con todo el mundo. Luego recapacito y sé que así no se hace… pero siempre después de pegar cuatro gritos. Esto lo intento corregir, pero no sé yo.

- Cuando sólo veo el problema y no las posibles soluciones.



De todos modos, que hay de malo en ser una niña grande?

lunes, mayo 22, 2006

Playa




Ya hemos empezado con los domingos de playa. Ya apetece ir a la playa y tomarte un bañito mientras hablas con tus amigos.

Este domingo hemos ido a la playa; y aunque hacía un poco de aire; se estaba de maravilla.

Me encanta la playa, aunque a decir verdad, soy un poco vaga y me cuesta decidirme a ir.

Lo que más me gusta de la playa es tumbarme en la toalla y relajarme, combinándolo con entradas al agua, siempre que el agua esté medianamente limpia. Me gusta jugar dentro del agua con mis amigos, o incluso estar tranquilamente dentro del agua y hablando con alguien. También me gusta estar abrazadita a alguien y que las olas te tiren, jajajaja.

De pequeña mi padre siempre nos llevaba a la playa a mi hermano y a mí por las tardes, cuando salíamos del colegio (en junio solo iba al colegio por la mañana). Yo creo que era una de las maneras para no pasar calor en casa, y otra manera de que no le incordiasemos mucho.

Siempre nos poníamos perdidos de arena, porque nos poníamos a jugar a hacer castillos; y cuando llegabamos a casa, teníamos más arena dentro del bañador que fuera, jejeje.

Esta vez, para ser mi primera toma de contacto con el sol, no ha estado mal, y eso que estuvimos en la playa desde aproximadamente las 11:30 hasta las 18:30. Estuve todo el rato poniéndome cremita. Es curioso, estoy roja, eso es inevitable, y más teniendo la piel tan blanca como la tengo (mi padre es pelirrojo), pero no me he quemado. No me molesta, no me duele y no estoy ardiendo. Así que puedo quedarme contenta, porque creo que por primera vez, no me he quemado tanto como otros años.

Recuerdo una vez, que fuimos a la playa mi amiga Cris y yo, el día de las Hogueras de San Juan. Estuvimos desde las 10:00 de la mañana o así hasta las tantas de la noche. Cuando llegué a casa y me quité el bikini... parecía que me había puesto otro bikini blanco. Tenía las líneas del bikini perfectamente delimitadas. La madre de mi amiga se asustó y todo cuando me vio, y mi madre me echó una bronca de tres pares de narices. Esos días el after sun se convirtió en mi mejor amigo... y mi madre en la persona a la que tenía que implorar casi con pataletas que me pusiera cremita!!! ><

Pero ahora ya tengo más cabeza (o eso creo); y estoy contenta porque el primer día de playa lo he pasado con aprobado alto, y eso que cascaba a base de bien el sol.

Boda


El día 20 de mayo se casó mi amiga Ana. Nos conocemos de hace muchísimo tiempo, desde antes de tomar la comunión.

Estaba guapísima. Tanto ella, como toda su familia. Yo iba a la boda sola, sin conocer a nadie prácticamente, y estuve sentada en una mesa donde sólo conocía a una chica, y de haberla visto un par de veces al ir a ver a Ana a su casa.

La Boda estuvo genial, mucho mejor de lo que me esperaba. La comida riquísima, las bromas de los amigos bastante sonadas (al novio, lo vistieron de enfermera, salieron todos con unos labios incorporados en la boca... y unos labios gigantes de cartón piedra le esperaban al novio, para que metiera la mano, se peleara con anguilas vivas y consiguiera el regalo).

Y luego llegó lo que hizo que casi me muriera de la vergüenza. Ponen una balada, y dicen por el micrófono: ahora la novia hará entrega del ramo a una persona muy especial para ella.

Vine directa a mí, pero me esquiva, rodea mi mesa (q era redonda) y cuando se dispone a irse, vuelve a mí y me dice: para tí.

Y allí estaba yo... sola, muerta de la vergüenza y todo el salón mirándome. Y yo: a mí???

Lo bueno fue contarle luego a Eydrom que me han regalado el ramo de la novia!!! jejejeje.


lunes, mayo 15, 2006

Amistad I

Amigas

Hay gente con la que conectas bien desde el principio, gente a la que empiezas a tomarle cariño con el tiempo y gente que te cae mal desde el principio.

Me puedo considerar afortunada porque tengo unas amigas excepcionales. Cada una en un sitio, y conocida de una manera distinta.

El jueves pasado quedé con una de ellas. Mi niña Rosita. Como siempre que nos vemos nos tiramos media hora recordando cosas de cuando íbamos juntas al Instituto. Con Rosa conecté desde el principio, tal vez porque nos parecemos bastante.

La verdad es que la veo menos de lo que me gustaría, y eso que vivimos en la misma ciudad. Cada una ha tirado por un camino, pero lo que me gusta de nuestra amistad, es que las dos sabemos que en el momento en que una necesita ayuda, consejos o simplemente ver a la otra, estamos ahí. Esto no pasa con todo el mundo, que hay gente con la que tienes que implorar que te haga un hueco en la agenda y siempre pone excusas.

El año pasado se murió su padre. Su padre era un hombre maravilloso. Según Rosa le preguntaba mucho por mí cuando nos distanciamos a causa del trabajo, novio, etc. Siempre que lo veía me trataba como su hija. Me entristeció mucho verlo en el hospital, ya en estado de coma, y sobretodo ver a Rosa triste. Estuve ahí dándole apoyo, en cuanto me llamó salí corriendo a verla esa misma tarde, dejando todo lo que tenía pendiente. Yo sé que ella hubiera hecho lo mismo en mi lugar.

Me alegra verla de nuevo feliz. Estaba tan triste, aunque es normal, yo después del entierro estuve un tiempo acordándome de Jose (su padre), no quiero ni imaginarme por lo que ha debido pasar Rosa.

Pero la vida sigue, y yo sabía que Rosa es fuerte y lo superaría.

Cuando nos vimos el jueves, las dos estábamos con lagrimillas en los ojos. Me suele pasar cuando veo a gente a la que no veo de seguido.

Algo por el estilo me pasa con otra gran amiga. Clara. A Clara la conozco desde hace más tiempo. Veraneábamos en el mismo pueblo, y aunque ya no vayamos por el pueblo ninguna de las dos, seguimos teniendo la amistad intacta.

El domingo me llamó para darme una sorpresa. Se casa. Ya me chocó que me presentara a su novio hace un año. Digamos que Clara no había tenido ningún novio formal. Es bastante independiente, y sinceramente, tanto Eva como yo pensábamos que en la vida se casaría.

Todo le va genial. Se ha montado su propio negocio, tiene ya un piso y fecha de boda. Su novio es muy majo, lo que me alegra, no me gustaría que hubiera acabado con un capullo.

Con Eva (también amiga del pueblo) nos pasa lo mismo. Éramos las tres mosqueteras. Y aunque no nos veamos casi, en cuanto nos vemos seguimos llevándonos tan bien como siempre, como si no hubiera pasado el tiempo; solo que las preocupaciones y las inquietudes cambian conforme vamos madurando.

Otra gran amiga, y ésta es desde siempre, es Cris. Daría cualquier cosa por ella. Siempre ha estado ahí cuando la he necesitado, y yo si me llamara por lo que fuera, dejaría todo para estar con ella. Cris y yo nos conocemos desde siempre. Nunca hemos ido a clase juntas, aunque fuéramos al mismo colegio. Ella iba a A y yo a B; aún así todas las tardes estábamos juntas. Conforme fuimos creciendo salíamos juntas. Muchas veces nos íbamos ella y yo mano a mano de fiesta. No necesitábamos más gente. Han ido pasando más amigas, pero al final siempre quedábamos ella y yo.

Cris vive ahora en Madrid. Ironías de la vida. Yo, cuando se puso a salir con un chico de Madrid le decía: cómo puedes mantener una relación a distancia? Yo no podría en la vida. Por mucho que me gustara un chico, no lo soportaría. Ya ves… si en esta vida no se puede decir nada. Ahora estoy yo también con un chico de Madrid. Lo que son las cosas.

Lo que me da mucha rabia de mí es que soy una dejada. Siempre se me pasa llamar a la gente. Y no es porque no quiera, simplemente lo voy dejando… y luego se me pasa. Me daría cabezazos contra la pared, pero yo sé que mis amigas saben como soy, y no necesitan que esté encima de ellas, espero que sepan que aunque parezca que no me acuerdo de ellas no es así.

Tengo muchas amigas más, pero las que he nombrado son las que no suelo ver a menudo.

A mí me gusta la gente que se comporta siempre igual. No me gustan las que dicen que son amigas tuyas, y dependiendo de quien esté delante actúa de una manera o de otra. O las que notas que todo es falsedad.

A veces puedo parecer tonta, que no me entero de lo que pasa alrededor, pero quien me conoce un poco sabe que eso no es así. Lo que pasa es que paso de los problemas y dejo que crean que me he creído lo que me cuentan.

Tampoco entiendo la gente que echa en cara que no las llamas, cuando ellas tampoco hacen nada para quedar contigo. O peor aún, que sin motivo aparente ni se acuerdan de ti, simplemente porque ya no entras dentro de sus planes.

Se supone que si lo había era amistad, simplemente por no verse no tiene porque extinguirse, pero vamos, eso te hace darte cuenta de quienes son tus amigos de verdad y quienes no.

En resumen, me siento afortunada por tener una amigas como las que tengo.

Me he dejado unas cuantas que también están siempre que las necesitas, pero como las veo más a menudo… pues ellas ya saben que las aprecio.

Y mira que es raro, que siempre suelo llevarme mejor con los chicos que con las chicas, será porque no soy el tipo de chica habitual. Mis amigos siempre bromean con que soy medio tío porque me apunto a hacer cualquier cosa. Que vamos a esquiar, yo voy. A jugar a squash, yo también, que vamos a emborracharnos, yo también; a jugar a los dardos… ídem.

Ya hablaré de mis amigos “masculinos”; pero eso será otro día.


Y también, gracias a Internet, tengo amigos excepcionales, de los que a base de Kdds y demás conectas de maravilla y siempre que piensas en alguien tienes buenos recuerdos, pero eso también necesita una entrada exclusiva.

martes, mayo 09, 2006

De vuelta!

De vuelta al día a día. Puffff, se me hace cuesta arriba, pero para ser sincera diré, que menos de lo que me esperaba.

Ayer volví de mi viaje por centroeuropa y decir que ha sido fantástico. Nos ha pasado de todo. Desde que nos robaran una botella de agua caliente en el aeropuerto de Londres a tener un accidente con la Ford Transit que alquilamos al tercer día, dormir en auténticos HOSTEL... jejeje.

Ya haré una crónica más detallada poco a poco cuando tenga las fotos.

Hemos comido hasta saciarnos, andado lo innombrable, usado trenes, metros, etc, pq nos quedamos sin vehículo, bebido cerveza a punta pala... pufffff

Y que decir de los sitios:

Bratislava: se come genial, ciudad barata, eso sí, le queda mucho para ser una ciudad en condiciones, parece que acaben de salir de una guerra.

Budapest: Preciosa. Se come muy bien también. No todo el mundo habla el inglés, y en la vida olvidaré el cruce del piño con la Transit!!! (Ni los chicos con los que íbamos a la policia rubita... q todos querían ser detenidos! jejeje).

Viena: Muy bonita. Más cara que todo lo demás. El café... que quieres que te diga, a mí me ha decepcionado, parecía agua, eso sí, los dulces maravillosos.

Praga: Puffff, una pasada, la cámara de fotos no dejaba de funcionar. Se come genial, y además barato. La catedral de San Vito impresionante, al igual que el cementerio Judío, el Puente de Carlos... precioso todo. Nunca olvidaré el chupito (bastante generoso) de absenta de 70º tomado como Dios manda.

Ceskÿ Krumlov: (O algo así) Impresionante pueblecito medieval de la República checa, donde la cena era barata en cantidad y calidad, al igual que la cerveza. Todo el pueblo rodeado de un río con mucho caudal y muy, muy medieval. Vamos, de cuento.

Linz: Ciudad Industrial. Prácticamente ni la vimos, al menos yo, que pasé casi todo el rato en la estación esperando a que los demás arreglaran un vehículo de alquiler.

Mauthausen: impresionante, se te hiela la sangre de ver las barbaridades que se cometieron; es algo que no se ha de olvidar.

Y bueno, muchísimas cosas más... jejejeje.